La pivote tinerfeña se sometió este martes al reconocimiento médico en el Hospital Perpetuo Socorro y aprovechó la ocasión para hablar de sus primeras impresiones como jugadora del Rocasa Gran Canaria, en una temporada en la que espera poder aportar su granito de arena para lograr los objetivos marcados por el equipo para una temporada que promete grandes emociones
Sonriente en todo momento a pesar del esfuerzo máximo al que fue sometida por la Doctora Clara Quintana y su equipo de trabajo durante la intensa prueba de esfuerzo, Alba se mostró ilusionada con el nuevo reto profesional que se abre esta temporada ante si en su carrera y en la que espera aprender todo lo que pueda de su compañera de posición, Haridian Rodríguez y del resto de sus compañeras y del cuerpo técnico, con Carlos Herrera a la cabeza.
Buenas sensaciones en su primera toma de contacto
“Me sentí muy bien en la presentación de ayer ante los MMCC. Ya conocía a alguna de mis compañeras al haber coincidido en las convocatorias de la Selección Canaria. Me he sentido muy acogida desde el primer momento”.
“Fue un primer entrenamiento suave en cuanto a intensidad para ellas, pero era una primera toma de contacto en la que lo más importante fue que las primeras sensaciones fueron buenas y que somos conscientes de que con el transcurso de los días el equipo va a crecer a medida que nos vayamos compenetrando cada vez mejor las unas con las otras”.
El rol que le tiene preparado Carlos Herrera
“He tenido oportunidad de hablar con el coach, pero todavía no hemos hablado del rol que en principio tiene pensado para mí, aunque supongo que su idea inicial será que juegue de pivote por detrás de Haridian y no se todavía si tendré ocasión de jugar en primera línea en alguna ocasión”.
Dos referentes del más alto nivel en la plantilla
“Silvia Navarro yo creo que es un referente para todas nosotras en el equipo y en mi caso también lo es Haridian porque considero que la temporada pasada hizo una gran campaña y al yo ser pivote creo que me va a venir estupendamente el poder entrenar con ella cada día”.
Un trato exquisito por parte del cuerpo médico del Hospital Perpetuo Socorro
“Nos han tratado muy bien y en cuanto a la prueba de esfuerzo ha sido algo complicada por la incomodidad de tener que correr con la máscara puesta, pero creo que ha ido todo muy bien. Me han dicho que todavía tengo un amplio margen de mejora por delante y poco a poco iremos mejorando cada vez más”.
“En toda mi trayectoria profesional nunca me había sometido a un reconocimiento médico tan completo y exhaustivo, la verdad es que me han sometido a todo tipo de pruebas y todo ha ido estupendamente”.