Supercopa de España
El 31 de agosto de 2019 el Rocasa Gran Canaria ponía fin a la leyenda negra de sus enfrentamientos directos ante el Super Amara Bera Bera, que se había impuesto en sus 3 choques en la temporada 2018-19.
Todo parecía presagiar un cuarto triunfo consecutivo de las donostiarras, en una nueva final para las teldenses, que se celebraba en tierra hostil, en Eibar, con un apoyo masivo de la afición del Bera Bera y por si fuera poco, con la baja de última hora de Silvia Navarro aquejada de unas piedras en el riñón, que obligaba a las grancanarias a dar la responsabilidad de la portería a la recién llegada, Ana Palomino.
En el transcurso del partido, el Rocasa perdía por lesión a Sayna, pero Palomino se convertía en una de las heroinas de la historia, María González se vestía del Cid Campeador para liderar a sus compañeras a pesar de no haber podido entrenar en toda la pretemporada y Lisandra Lussón forzaba la prórroga desde los 7 metros en un final apoteósico que llevaba a las Guerreras de Telde a sumar la 2ª Supercopa de España de su historia, por un ajustado 32-31 final.
El Rocasa sacaba a relucir su gen competitivo, en un partido que tuvieron controlado en todo momento, jugando con la amplia renta a su favor y con la ventaja de 3 goles que lograban al descanso y que hacía la gesta de las centroeuropeas prácticamente imposible, a pesar de perder por un ajustado 23-24 el partido, las grancanarias sumaban su 2º entorchado continental, tras el conseguido en 2016.