Las pupilas de Robert Cuesta realizaron una gran actuación sumando su segunda victoria de la temporada y la primera en casa (37-21). Las amarillas doblegaron a un Sant Quirze que lo intentó con todo pero se diuyó en el tramo final de la primera mitad. Katarina Pavlovic se estrenó ante su afición con un partidazo y Amanda Toledo hizo se debut oficial como jugadora del Rocasa
Un estreno en casa soñado. El Rocasa Gran Canaria sumó su segundo triunfo del curso tras doblegar a un Sant Quirze que no pudo frenar a las amarillas (37-21). Las de Robert Cuesta realizaron un gran partido, dinamitando el encuentro en el final de la primera parte. Ya en la segunda el ritmo se mantuvo para terminar de cerrar el debut en casa que deja claro que el Rocasa quiere aspirar a los máximo este curso.
El Rocasa domina y se desata en el tramo final del primer tiempo
El calor de la ruidosa afición del Rocasa se hizo notar desde el primer minuto de un partido donde las amarillas se mostraron bastante sólidas. De forma rápida el Rocasa fue capaz de encontrar una buena ventaja gracias a una Katarina Pavlovic que sacó el cañón a paseo y a un ritmo rapidísimo. En ese momento, Sant Quirze no pudo frenar la contundencia de unos ataques, los locales, vertiginosos (6-2).
Pavlovic continuó con su buen tono goleador y no paró de destrozar las mallas de Marina Millán, pero las catalanas se asentaron con el paso de los minutos. De ese modo, lograron un pequeño parcial con el que mejoraron claramente sus sensaciones. Aun así, le tocó al Rocasa remar porque al cuadro barcelonés le vino bien no exponerse mucho para cuidar el balón, ralentizando así el encuentro.
Pese a ello, tanto Silvia Navarro como la defensa amarilla volvieron a cerrarse mejor y el ataque comenzó a tener más efectividad. Eso les dio cierto respiro a la hora de recuperar su sitio en el partido, lo cual llevó a Robert Cuesta a darle la oportunidad de debutar a Amanda Toledo. La cubana se estrenó con la camiseta del Rocasa pocos días después de su aterrizaje dejando ya destellos de sus cualidades.
Entre tanto, Alba Spugnini continuó donde lo dejó en la pasada jornada; su idilio con el gol seguía siendo fuerte y la tinerfeña no dudó a la hora de ver portería para aumentar la ventaja del Rocasa (14-7). También fueron grandes minutos para una Silvia Navarro desatada bajo palos, frenando y secando con paradas el ataque de un Sant Quirze que se atascó de forma notable tras cuajar unos buenos minutos.
Sin embargo, la locura llegó durante el tramo final de esta primera parte. El Rocasa puso la sexta marcha y, entre las paradas de Navarro y la velocidad de ejecución de sus contraataques, alcanzaron la máxima ventaja del encuentro. Fueron los mejores minutos de las amarillas en el choque, dejando claro con mucha contundencia que quería dominar el partido a su antojo en busca de una nueva victoria liguera (19-9).
Las amarillas no ceden para cerrar un gran debut en casa
La salida de los vestuarios dio muestras de lo enchufados que estaban ambos equipos. No obstante, en ese intercambio de golpes el Rocasa Gran Canaria tenía todas las de ganar y continuó dejándolo claro con el contraataque como principal arma. En ese sentido, la ventaja ya era lo suficientemente cómoda para relajarse, pero ni mucho menos iban a bajar los brazos; tocaba seguir trabajando (24-12).
Sant Quirze quiso desquitarse un poco y reducir ventajas tratando de ser más agresivas tanto en defensa, buscando una nueva ventaja táctica, como en ataque. La premisa era soprender a las grancanarias e intentar sumar un parcial con el que poder crecer en sensaciones, aunque delante tenían a un Rocasa que se mantuvo serio en todo momento. Mientras tanto, la afición seguía disfrutando del juego local.
Ahí fue cuando Mizuki Hosoe decidió llevarse todos los focos al asumir muchas responsabilidades ofensivas, siendo descarada y buscando la portería con claridad. Pese a todo, el choque se convirtió en un pequeño correcalles que no benefició a ninguno, un aspecto que paró Dolo Martín con un tiempo muerto con la idea de reorganizar un poco más a su equipo. Quedaban 10 minutos por delante (32-18).
Robert Cuesta aprovechó que el partido le iba muy de cara al Rocasa para dar también minutos a las canteranas. La llamada del técnico catalán fue respondida por una Nerea Guerra muy incisiva y acertada, anotando hasta 3 tantos seguidos que aumentaron un poco más la ventaja local. Con ese escenario, volvió también a la pista una Amanda Toledo que aprovechó sus minutos para seguir rondándose.
Los minutos finales fueron en la línea de todo el partido, ya que el Rocasa cuajó una enorme actuación que sirve para que la confianza se mantenga alta. Estos estrenos en la Liga Guerreras Iberdrola, tanto fuera de casa como en casa, han servido como toma de contacto de lo que quieren las amarillas este año, pero también es una declaración de intenciones para dejar patentes que van a pelear por todo (37-21).
Ficha del partido
Encuentro correspondiente a la segunda jornada de la Liga Guerreras Iberdrola celebrado en el Pabellón Insular Antonio Moreno, Telde.
Árbitros: Antonio Javier García del Salto y José Antonio Huertas Herrador.
Parciales cada 5 minutos: 3-1, 6-3, 9-5, 11-5, 13-7, 19-9; 22-11, 25-14, 29-17, 32-18, 35-19 y 37-21.
ROCASA GRAN CANARIA (37): Silvia Navarro (P), Melania Falcón (1), Arinegua Pérez (3), Alba Spugnini (6), María González, Mizuki Hosoe (3) y Katarina Pavlovic (7) – Ana Palomino (PS), Amanda Toledo, Esther de Miguel, Vasiliki Gkatziou (4), Yuli Quevedo (2), Sayna Mbengue (7), Nerea Guerra (3), Yanire Torres y Susana Martín (1).
HANDBOL SANT QUIRZE (21): Marina Millán (P), Galala Carreras (1), Ona Vila (1), Paula Plana (5), Remei Prat (3), Nerea Gil (3) y Judith Sanz (1) – Olga Moliner (PS), Ane Crespo, Julia Puiggene (2), Clara Moliner, Ekaterina Tyaglyay (1), Miram González, Marina Rodríguez (1), Paula Pérez (1) y Julia Nuez (2).