Tres victorias y tres derrotas es el balance del Rocasa Gran Canaria en la Liga Guerreras Iberdrola en la presente temporada. Las jugadoras que dirige Carlos Herrera alzaron el telón del curso 25/26 con dos victorias consecutivas con las que desatar el optimismo en torno a una plantilla joven y renovada. Una derrota, tras un gran partido, ante el Súper Amara Bera Bera en San Sebastián y un nuevo triunfo en el derbi canario en casa ante el CICAR Lanzarote Ciudad de Arrecife dieron paso a dos tropiezos seguidos.

A pesar de los últimos contratiempos, ante Beti-Onak lejos de Gran Canaria, y ante el Costa del Sol Málaga en el Antonio Moreno, la ambición sigue siendo la misma: “Dos tropiezos no cambian nuestro objetivo, ni el nivel de ambición que tenemos dentro del vestuario. Sabemos que el camino hacia los títulos no es fácil y que habrá momentos difíciles, pero confiamos plenamente en el trabajo que estamos haciendo y en el potencial del equipo. Si seguimos creciendo y corrigiendo errores, vamos a estar en la pelea, porque tenemos equipo y mentalidad de sobra”, afirma Lourdes, “Lulú” Guerra, una de las voces autorizadas del equipo.

La portera grancanaria recuerda el ADN de un equipo ganador: “El Rocasa está construido para competir en la zona alta y ésa sigue siendo nuestra meta y sabemos que podemos lograr grandes cosas. En la plantilla se respira compromiso, unión y ambición y estas jugadoras nunca bajan los brazos”, asegura.

Precisamente, el poder de reacción, la madurez y la capacidad para pelear los sesenta minutos de cada partido son los aspectos que más destaca una de las capitanas del primer equipo: “Hemos mejorado bastante en buscar la victoria desde el primer minuto y demostrar que somos un equipo difícil de ganar”, explica, antes de añadir que “también hemos ganado en carácter y confianza. El año pasado hubo momentos en los que, cuando el partido se complicaba, nos costaba reaccionar. Este año, en cambio, estamos demostrando que sabemos sufrir y darle la vuelta a las situaciones difíciles sin desesperarnos. Esa madurez es clave para seguir sumando triunfos”.

La veterana y talentosa jugadora sabe que aprender de las derrotas sigue siendo el paso más directo para mejorar las prestaciones y retornar a la senda de las victorias: “Hemos hecho autocrítica para ver en qué parcela es necesario dar un paso más. Nos desconectamos en algunos tramos de partido y dejamos que el rival impusiera su ritmo y eso se paga. Nos faltó continuidad y ser más contundentes en los momentos calientes, pero lo positivo es que sabemos perfectamente cómo corregirlo. Lejos de hundirnos, volveremos a jugar con más hambre de triunfos”, advirtió.

El Rocasa Gran Canaria sigue con su preparación de cara al partido que le enfrentará al Caja Rural Aula Valladolid este sábado, 25 de octubre, a las 18:00 horas en el pabellón Huerta del Rey, con motivo de la 7ª jornada de la Liga Guerreras Iberdrola.