La internacional cubana decía adiós por segunda vez en este 2020 a su carrera profesional, tras brindar un último servicio al club de su vida, el Rocasa Gran Canaria, tras reincorporarse al equipo para cubrir la baja de la austríaca Adriana Marksteiner, quien se incorporará tras el parón navideño al equipo, en un cambio de cromos que deja a la afición teldense sin uno de sus principales referentes ofensivos desde su llegada a la isla
Lisandra regresaba como temporera al equipo el pasado 9 de julio tras alcanzar un acuerdo con la entidad teldense, para cubrir la desgraciada lesión de Adriana Marksteiner, en una decisión meditada que le permitía por una parte ayudar al equipo de su corazón y por otra, poder despedirse de su afición en la pista.
La misión no era nada sencilla para una jugadora con las ideas tan claras como las de Lisandra Lussón, quién se retiraba el pasado 4 de mayo tras una larga y valorada reflexión, para centrarse en su nueva carrera como entrenadora en las categorías de base del Rocasa Gran Canaria.
Sin embargo, una vez más la cubana volvía a dar lo mejor de si misma, tras una pretemporada atípica sin más amistosos que los de la Copa Gobierno de Canarias y con un equipo renovado y en busca de volver a ser aspirante a todos los títulos en juego.
Lisandra volvía y lo hacía para ser una más, para vaciarse en cada entrenamiento, en cada partido, en cada jugada, volviendo a ser la jugadora que ha enamorado a una afición que la venera y no es para menos tras una intachable hoja de servicios al club que deja en las vitrinas de la entidad teldense 1 Liga Guerreras Iberdrola, 1 Copa de la Reina, 1 EHF Challenge Cup y 2 Supercopas de España.
Lussón se retira tras dejar al equipo en los octavos de final de la nueva EHF European Cup tras eliminar al Colègio de Gaia portugués ante su público y lo hacía como no podía ser de otra manera, siendo la máxima goleadora del partido con 5 goles. Pero por si fuera poca aportación, la cubana deja al Rocasa Gran Canaria como 2º clasificado del Grupo 2 de la Liga Guerreras Iberdrola, siendo además la máxima goleadora del equipo junto a Haridian Rodríguez, con 24 goles en sus 6 partidos disputados este curso.
Lisandra se retira, pero su carácter y su pasión por el balonmano seguirá trasnmitiéndolo en los equipos de base de su club, que tendrá la inmensa fortuna de seguir contando en su cantera con una jugadora única e irrepetible en la historia del Rocasa Gran Canaria.
¡Gracias Lisandra!